Recomendaciones para crear un completo vídeo infográfico

Según aparece recogido en diferentes estudios de referencia sobre diseño gráfico, como el desarrollado por INDI Marketers, el 80% de la información transmitida al cerebro es de tipo visual, siendo apenas un 20% de texto lo que solemos recordar. Atendiendo a estos datos, no resulta nada extraño el auge que en los últimos años está adquiriendo el vídeo infográfico en la sólida relación que se establece entre las nuevas tecnologías, la publicidad y el comercio digital.

 

La importancia del vídeo infográfico en la actualidad

 

Son muchos los expertos digitales que consideran que, en la actualidad, el vídeo infográfico es una de las herramientas de marketing más efectivas. Volviendo a las estadísticas, y según recoge el Social Media Marketing Industry Report, insertar un vídeo de este tipo en una web provoca que se aumente en más de un 40% el número de clics obtenidos en los resultados de búsqueda, por lo que llega a ser una herramienta mucho más práctica y rentable que las estáticas páginas de texto sin formato.

Además, debes tener en cuenta que el objetivo del vídeo infográfico es ofrecer una gran cantidad de información de forma rápida y sencilla, aprovechando al máximo el impacto visual. Gracias al dinamismo de las imágenes, resulta más sencilla la tarea de observar y memorizar la información con apenas un visionado. De ahí que el contenido tenga que ser totalmente práctico y conciso.

Si echas un rápido vistazo a los vídeos infográficos que pueblan la red, existen una serie de supuestos esenciales que se cumplen en la mayoría de ellos. Esto quiere decir que, en realidad, casi todos siguen una serie de pautas y recomendaciones básicas para su creación. A partir de las mismas, será la capacidad creativa y la originalidad de tu producto visual la que haga que se desmarque del resto de propuestas existentes y consiga captar la atención de los usuarios.

 

Pautas y recomendaciones básicas para crear un vídeo infográfico de éxito

 

Antes de crear tu vídeo infográfico es fundamental que tengas muy claro lo que quieres hacer, es decir, la idea que quieres desarrollar, y que solicites ayuda a un experto en la materia si tienes dudas. En un borrador previo, puedes anotar todas las ideas que se te ocurran para luego llevarlas a la práctica con orden, desechando algunas que finalmente no te convenzan. En resumidas cuentas, se trata de captar la atención, pero no de marear la perdiz con una gran cantidad de datos que no resulten de utilidad.

Precisamente, la mayoría de vídeos infográficos no son demasiado extensos. Los más simples y fáciles de entender son tal vez los que tienen más éxito, ya que simplifican sus ideas principales y secundarias hasta conseguir que sean totalmente entendibles. En muchas ocasiones, es mejor realizar varios vídeos animados de corta duración (no más de 2 o 3 minutos), que uno más largo que canse al usuario. Sin duda, lo que el vídeo infográfico debe transmitir es información de calidad, sin ningún tipo de relleno.

En cuanto a la línea gráfica, hay quien se decanta por un diseño espectacular para paliar así la falta de contenido. Lo más práctico es que se alcance un equilibrio de fuerzas entre lo visual y lo textual. Por ello, uno de los errores más comunes es sobrecargar el vídeo con texto, imágenes y muchos datos que apenas puedan ser analizados. Esto es muy probable que agote al usuario que se asoma a visualizar el vídeo. Sin embargo, nunca hay que perder de vista la premisa de que “una imagen vale más que mil palabras”.

Además, una de las razones por las que los usuarios se decantan por la visualización de un vídeo infográfico u otro es el título del mismo. Como en la mayoría de las ocasiones, este debe enganchar e impactar. Un título así se consigue atendiendo a lo estrictamente necesario, sin dar demasiados rodeos y satisfaciendo una necesidad informativa concreta.

Junto a este concepto, los segundos posteriores a la lectura del título son muy importantes en cualquier vídeo infográfico. Es el momento en el que debes conseguir enganchar al usuario. Si no logras conectar, dejará de verlo. Para ello, puedes usar el humor, apelar a las emociones o aportar información de utilidad que sepas que no encontrarán en otro sitio, entre otras muchas alternativas. También debes tener en cuenta que, desde el primer momento, un vídeo infográfico es una poderosa y potente herramienta de marketing y hay que tratarla y usarla como tal. La gran mayoría de usuarios de Internet prefieren escuchar y ver antes que leer, siempre y cuando lo que reciban a través del visionado sea un contenido de interés, preciso y sencillo. Finalmente, si sigues las recomendaciones que te proponemos y cuentas con la ayuda de los profesionales adecuados para conseguir tus objetivos, es muy probable que tus inicios en este apartado del marketing digital sean muy productivos.